esde hace 30 años existe la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño. Todos los países la han ratificado, a excepción de EEUU.

Desde hace 30 años existe la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño. Todos los países la han ratificado, a excepción de EEUU. Desde entonces, los países que han ratificado la Convención deben presentar un informe al Comité de los Derechos del Niño de la ONU cada cinco años, por tratarse de un instrumento de carácter vinculante a diferencia de la Declaración de los Derechos del Niño de 1959.

Este tránsito de la Declaración de los Derechos a la promulgación de un instrumento vinculante como es la Convención fue una especie de ajuste de cuentas entre la consideración del niño, llamado menor como objeto de compasión, protección y control a la consideración de la niñez y adolescencia como sujeto de derechos, es decir poseedor legítimo de derechos exigibles a la familia, el Estado y la comunidad.

Luego de tres décadas de vigencia de la Convención sobre los Derechos del Niño, salta la interrogante ¿Cuál es el estado de situación de los derechos de la niñez y adolescencia en Bolivia?

En cuanto al Derecho a la Supervivencia, una revisión evaluativa de los datos, nos dice que la mortalidad infantil si bien ha disminuido en la última década en un 50%; sin embargo, aún alrededor de veinte mil niños y niñas menores de cinco años mueren anualmente. Por otra parte si bien la desnutrición crónica disminuyó de 32% a 16% en niños y niñas menores de 5 años; pero en el caso de los niños y niñas de 6 a 23 meses de edad, la desnutrición crónica solo bajo en un 10%.

En relación al derecho a la educación si bien se avanzó en la cobertura de la matrícula escolar del nivel de primaria, pero aún solo cerca de seis de cada diez adolescentes ejercen el derecho a la educación, además de la deficiente calidad educativa.

Hasta aquí podemos verificar que existen ciertos logros en los ámbitos de supervivencia y educación; pero que sin embargo en el ámbito del Derecho a la Protección aún el 82% de niñas y niños declaran ser maltratados en el hogar, y cerca de cuatro de cada diez en el ámbito escolar tanto por profesores como por sus propios compañeros, a lo que debemos añadir que alrededor de un tercio de niños, niñas y adolescentes de 5 a 17 años están ocupados en actividades económicas, la mitad de los cuales realizan trabajos peligrosos.

El otro ámbito de alta vulneración de derechos se constata en la escasa participación de las niñas, niños y adolescentes en la toma de decisiones, puesto que solo alrededor de un 10% de adolescentes mencionaron entre sus actividades el compartir con sus pares en algún tipo de agrupación, verificándose que a pesar que la democracia propugna la ciudadanía como forma de vida política y social es innegable que no solo los procesos de exclusión en sus diversas formas niegan la condición de ciudadanía a los niños, niñas o adolescentes si no que lo hacen además por tratarse de “menores”, en un ambiente de predominio del concepto de ciudadanía restringida al acto de elegir o ser elegido, a contrapelo de una genuina construcción de ciudadanía que se traduzca en el derecho a tener derechos.

Y aquí salta a la vista la necesaria actualización de la Convención, especialmente en lo referente a los derechos digitales para la niñez y adolescencia, relacionado de manera directa con las nuevas formas de ejercicio del derecho a la participación. Hoy en día, es importante que los niños y adolescentes tengan derecho a un Internet seguro, para que tengan acceso a la información, la comunicación, el diálogo y la participación. 

En este sentido es saludable la organización y el lanzamiento reciente desde Holanda de “un país digital sin fronteras” para niños y adolescentes de todo el mundo constituyendo una plataforma a través de la cual los jóvenes de 13 a 24 años pueden reunirse, debatir y votar sobre temas, cuyos resultados luego se transmiten a los responsables políticos, como la experiencia de la elaboración de una declaración acerca de la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático, a realizarse en diciembre de 2019.